viernes, 23 de junio de 2006

La Emergencia


De lo general a lo particular

A nivel mundial los organismos internacionales coinciden en que América Latina es la región más inequitativa del mundo, ya que la estructura de distribución del ingreso es la más regresiva internacionalmente: es la región donde el 5% más rico recibe más que ninguna otra (25% del ingreso nacional) y el área en donde el 30% más pobre recibe menos (7.5% del ingreso nacional). A su vez, tiene la mayor brecha social de todas las regiones: el 10% más rico de la población de la región tiene un ingreso que es 84 veces el del más pobre.

En el año 2000, el Banco Mundial realizó una encuesta en gran escala a 40.000 “pobres del mundo” de 50 países, entre ellos varios en América Latina, quienes fueron indagados sobre sus percepciones de la pobreza. Allí explicaron que la pobreza no es sólo carencia de recursos básicos, también “destruye o erosiona a las familias y causa daños psicológicos y afectivos, es atentatoria contra su dignidad como seres humanos siendo una de sus vivencias centrales la “mirada desvalorizante” que converge sobre ellos desde diferentes sectores de la sociedad: se los ve como personas inferiores, casi sub-humanas por su pobreza material y ello afecta su autoestima y dignidad.”

La Ciudad de Buenos Aires con 2.725.488 de habitantes, centro del Área Metropolitana (que tiene cerca de 12 millones de habitantes y cubre un territorio de 4.000 has.), caracterizada por su rol de capital y puerto, sitio de concentración del poder político y económico y formando parte del grupo de las 15 áreas urbanas denominadas "megaciudades", no escapa a ninguno de estos problemas sociales delicados constituyendo en conjunto la verdadera “Emergencia Social y Urbana de la ciudad “ sufrida por el 7,8% de su población , es decir, 212.489 habitantes de los cuales el 65% habitan en la zona sur.

Extracto del articulo de la arquitecta Marita Olivarez publicado en el Correo de Noticias del FUP del 22 de mayo de 2006. La foto es de La Jornada de Mexico del 1 de febrero de 2003 www.jornada.unam.mx